Miguel Domingo, responsable de Comunicación e Imagen de Cruz Roja Española en Andalucía, presenta y materializa en este artículo la labor de esta entidad en la provincia de Cádiz, que gracias al apoyo de los Fondos Europeos, que él define como “un importante recurso de cohesión”, ha podido desarrollar numerosas iniciativas que se encuentran vigentes en la actualidad.
Cruz Roja desarrolla proyectos y actividades que cuentan con apoyo y financiación de la Unión Europea, destacando su Plan de Empleo, con el que desde hace 20 años ayudan a quienes tienen más dificultades para encontrar trabajo. Como expone Miguel Domingo, gracias a esos fondos han podido crecer, consolidar proyectos y contribuir a que la provincia de Cádiz mejore socialmente en áreas tan fundamentales como el Empleo, la Integración Social o la Igualdad de Género.
Gracias a este, la institución apoyó a más de 2.570 personas en 2021 en la provincia de Cádiz, de las cuales el 70% fueron mujeres y casi el 21% fueron jóvenes en riesgo de exclusión social.
Del total de participantes, 537 personas encontraron un trabajo gracias a su participación en el Plan de Empleo de Cruz Roja, a través del Programa Operativo de Inclusión Social y Economía Social (POISES) cofinanciado por el Fondo Social Europeo (FSE).
Este se divide en distintas secciones, todas ellas de relevancia para el desarrollo personal y social de las personas. Así, de una parte, este plan de empleo centra sus esfuerzos en la reducción de la desigualdad entre hombres y mujeres en cuestiones de empleo, agravada durante los años de la crisis, recrudeciendo la llamada feminización de la pobreza.
Gracias a los recursos procedentes de los citados fondos europeos, desde Cruz Roja Española se apoya a estas mujeres a partir del proyecto titulado Puentes hacia el Empleo, materializado en itinerarios laborales personalizados dirigidos a mujeres vulnerables: víctimas de violencia de género, mujeres con escasa capacitación y experiencia y miembros de familias afectadas por la crisis. Orientación, información sobre recursos laborales, formación en habilidades o capacitación en profesiones que tienen una mejor salida laboral son algunas de las líneas de actuación principales.
La entidad, por tanto, centra su actividad en diversidad de colectivos, con la mirada puesta especialmente en aquellas personas en situación de vulnerabilidad. Siendo su principal compromiso aliviar el sufrimiento ajeno en cualquier circunstancia, sin atender a su origen, género, ideología o religión, está presente en todas partes, desde los pueblos de la provincia de Cádiz a Ucrania, en mitad de un conflicto que está provocando una de las mayores crisis humanitarias de Europa en los últimos años.

OBJETIVOS
Uno de los objetivos es la reducción de la desigualdad entre hombres y mujeres en cuestiones de empleo.
Sus acciones van dirigidas al apoyo de personas mayores que sufren soledad; están al lado de quienes se encuentran en riesgo exclusión, como las personas sin hogar, así como las familias y personas que cuentan con necesidades sociales y económicas.
Actualmente es más relevante que nunca la atención de la entidad a las personas refugiadas, así como a las personas inmigrantes, pero también apoyan a otros colectivos como las mujeres víctimas de violencia de género, o a la infancia.
Así, a través del proyecto Itinerarios Integrales con Personas de Difícil Inserción, la entidad acompaña a estas personas gracias al apoyo de la orientación laboral y la formación. Aquí, especialmente, juega un papel fundamental el voluntariado, que traza de manera personalizada un itinerario laboral con cada participante. En este se refuerzan sus fortalezas, se estudian y afrontan sus posibles debilidades y sobre todo, se intenta aprovechar al máximo las oportunidades que el mercado laboral ofrece.
De otra parte, sobresalen los tres proyectos Aprender Trabajando, PULSA y Primeras oportunidades para jóvenes, a través del Programa Operativo de Empleo Juvenil (POEJ). Están dirigidos a jóvenes inscritos en el Fichero Nacional de Garantía Juvenil, centrado en fomentar las oportunidades para personas menores de 30 años y aúna formación y experiencias prácticas en el mundo laboral a través de una experiencia directa en empresas. En anteriores ediciones ha registrado altas tasas de inserción laboral, por encima del 85%.
Por último, en el proyecto Reto Social Empresarial: Alianzas se unifican los dos programas anteriores. Su objetivo es crear una red social en la que se coordine la propia institución con el tejido empresarial e institucional de la sociedad, logrando la implicación real de las empresas. Esto se traduce en prácticas no laborales, apoyo a la formación y a la orientación, a partir de talleres y cesión de espacios y, por supuesto, la intermediación laboral.

Preocupados por la justicia social
La atención de Cruz Roja a todas estas personas se aborda de manera integral, ofreciéndoles respuestas a sus necesidades desde diferentes áreas, con acciones sociales, actividades que favorecen su bienestar y su salud, apoyándolas en la inserción en el mercado de trabajo y con acciones de educación; todo ello, sin olvidar otras áreas que son prioritarias como es la respuesta en emergencias y, por supuesto, un compromiso firme por la sostenibilidad y el medio ambiente.
La organización está basada fundamentalmente en el voluntariado, pues se define como uno de sus siete principios fundamentales, junto al de Humanidad, Universalidad, Independencia, Unidad, Neutralidad e Imparcialidad; los mismos que comparte Cruz Roja en todo el mundo. Estos dos últimos toman un carácter especial en estos tiempos.
La amplísima red territorial con la que cuentan en España les permite llegar a casi a todas partes, de modo que están presentes en grandes ciudades y también en pueblos más pequeños. Así ocurre igualmente en 12 localidades gaditanas: Arcos, Jerez, El Puerto, Rota, Chipiona, Cádiz, San Fernando, Chiclana, Medina, Algeciras y Tarifa. En todas estas cuentan con Comités Locales; sin embargo, su actividad se extiende por muchos más puntos de la provincia, gracias al voluntariado especialmente, que es quien elige, precisamente, a los integrantes de los mencionados comités.
Esta red cuenta, por supuesto, con un equipo técnico de trabajadores y trabajadoras cuya labor es encomiable, y que sirve de apoyo a los voluntarios, que son, en último término, quienes intervienen con las personas. Además de este pilar, no hay que olvidar a los socios y socias, que permiten mantener la independencia de la entidad y desarrollar toda su labor humanitaria y social.
Trabajo en red en aras de una provincia resiliente
En los últimos años, como consecuencia de las crisis económicas, primero la del año 2008 y posteriormente la provocada por la pandemia, “las desigualdades se han agudizado”, como explica Miguel Domingo. Ante ello, desde la organización han tenido que adoptar actuaciones que dieran respuesta a las necesidades más urgentes, de entre las que destacan: la entrega de alimentos, ayudas económicas o el pago de suministros esenciales.

El programa Cruz Roja RESPONDE durante la pandemia actuó sobre necesidades de urgencia con la entrega de alimentos o el pago de suministros esenciales.
Dichas ayudas, de alguna manera, sirven de colchón para intervenir con acciones más integrales, que a medio y largo plazo son muy relevantes para reducir la pobreza, centrándose en el apoyo a niños y niñas, para que todos tengan el mismo derecho de acceso a la educación, independientemente de la zona de residencia o la renta, reduciendo, así, la brecha social.
La irrupción de la pandemia provocó que el número de personas a las que la organización tuvo que apoyar se multiplicara. Para ello, movilizaron un plan especial llamado Cruz Roja Responde que les permitió intervenir desde un primer momento, a pesar de las dificultades que planteaba el confinamiento y las lógicas medidas de prevención. Esa respuesta a la emergencia económica que vivimos en 2020, sigue en marcha para lograr la recuperación de las personas que sufrieron y aún sufren las consecuencias de la crisis.
Por otro lado, la difusión de información sobre el respeto del medioambiente, persiguiendo la meta de reducir la huella de carbono y el ahorro en el consumo eléctrico, así como la formación de las personas para que sean más resilientes ante la pérdida del empleo, son otras dos vías fundamentales de su actividad.
Miguel destaca la importancia del trabajo en red en los barrios que hace Cruz Roja, especialmente en aquellos donde más dificultades se encuentran, de modo que el entorno sea más favorable para el presente y el futuro.
Cruz Roja está más presente que nunca en la sociedad, a partir de fondos propios facilitados por los socios y socias, así como los procedentes del Fondo Social Europeo (FSE).
Con este apoyo esencial de los fondos europeos, la provincia de Cádiz ha prosperado en gran medida en los últimos años, pero queda aún mucho trabajo por hacer para reducir las desigualdades y continuar el camino hacia la justicia social.